Lectura: Col. 3:5-7; Fil. 4:8
La sexualidad a partir del siglo XIX se ha considerado como algo indecoroso y totalmente reñido con la vida espiritual. El decir que el sexo es algo malo, sucio y pecaminoso, es decir algo ¡nada más alejado de la realidad!
La pugna entre el Puritanismo y el Hedonismo. La palabra puritanismo se utiliza con frecuencia como un término que impone una moral rígida en asuntos sexuales y establece criterios estrictos en temas religiosos. Por último, la palabra puritanismo se utiliza con frecuencia como un término que impone una moral rígida en asuntos sexuales y establece criterios estrictos en temas religiosos.
El Hedonismo es la doctrina filosófica basada en la búsqueda del placer y la supresión del dolor como objetivo o razón de ser de la vida. El hedonismo es una teoría moral que constituye al placer (hedoné) en bien último o supremo fin de la vida humana; sostiene que el placer personal es el único fin último de una persona. El Hedonismo radical sostiene que todos los placeres físicos deben ser satisfechos sin ninguna restricción, sin embargo el cristianismo se opone al hedonismo porque mina los valores y virtudes de la fe establecido en el Libro de los Libros, la Palabra de Dios o Las Sagradas Escrituras, ya que ella es infalible e inerrante y nuestra única regla de fe y de conducta.
Volviendo a la sexualidad masculina diremos que es exigente. Alguien ha sugerido que las necesidades del hombre son: sexo, admiración, tener una mujer atractiva, compartir los mismos intereses y tener un hogar feliz. En cambio la sexualidad de la mujer es discreta. Ella necesita cariño, afecto sin sugerir sexo, mantener una comunicación afectiva y efectiva, exige honestidad de parte de su pareja, seguridad económica y apoyo en las tareas hogareñas.
Mi objetivo es alentar, motivar a la abstinencia, sin importarme que se me tilde de “rancio”, “anacrónico”, “fuera de onda” “arcaico” o “old fashion”. La sexualidad es responsabilidad de todos, pero debemos de empezar con los padres, los colegios, las iglesias y finalmente la decisión final será suya. La sexualidad debe ser aprendida y estudiada, recordando que Dios no premia la ignorancia...
Las malas decisiones en la vida sexual pueden torcer, alterar y destruir tus proyectos de vida. Las estadísticas de problemas sexuales son cada vez más alarmantes. Existe un incremento en la masturbación, tanto masculina como femenina; la pornografía está a la vuelta de la esquina, las relaciones prematrimoniales se incrementan, existe el “sexo express”, los “amigos con derechos”; es por eso que los embarazos no planificado están a la orden del día, el aborto ya es una costumbre, y nadie tiene derecho “prohibir lo prohibido” hablando de relaciones homosexuales y otras perversiones sexuales.
Sin embargo debemos mirar el adverso de la moneda las enfermedades de transmisión sexual: clamidia, herpes, papiloma, gonorrea, sífilis, HIV/SIDA.
Es lamentable que la conducta sexual dependa de la influencia social. En esta era del posmodernismo encontramos una falta de educación sexual, una decadencia de los valores ético y morales. Hoy vivimos confundidos y aún entre los cristianos, muchos jóvenes no saben qué es ir tan lejos en su relación con su pareja.
La Iglesia no debe callar en cuanto a la sexualidad. El sexo es algo natural, misterioso y placentero dentro del matrimonio. ¡El verdadero amor espera! Por lo tanto, debemos esperar, y mantenernos puro sexualmente hasta el día del matrimonio.
Reflexiones para el día de hoy…
1. Los animales no necesitan educación sexual, pues están programados instintivamente.
2. Quizás no hay otro tema entre algunos cristianos más incomprendido que la sexualidad.
3. No hay duda que hoy vemos el mundo muy distinto al que vieron nuestros abuelos.
4. La pornografía entra por los ojos.
5. La pornografía es una distorsión del acto sexual.
6. El ser humano es un ser sexual y un ser espiritual.
7. La sexualidad es don de Dios y no un capricho.
8. La sexualidad es un regalo de Dios, es un don de su gracia.
9. Donde está el Espíritu hay libertad, no libertinaje.
10. La base del verdadero amor es el compromiso. Mantenga la abstinencia.
Dr. Luis L. Gavin
Asesor de Desarrollo Humano
Conferenciante Internacional
Avc_2mil@yahoo.com
Agradeceremos deje su comentario
visite: www.peruvisionparaelmundo.com www.negociosydominios.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario